Me he sentido más cuidada hoy, después de leer
este artículo en El País, que tiene el título de "No se trata el Alzhéimer, se trata al enfermo" - solo le achaco un lenguaje que no visualiza adecuadamente a la mujer, principal "cuidadora".
Me gustaría resaltar algunos contenidos del artículo:
"Nos equivocamos de planteamiento. Se quiso tratar el alzhéimer como el déficit de dopamina que genera el párkinson, pero la enfermedad es mucho más compleja. Con estas sustancias se intenta compensar la pérdida de memoria, pero el alzhéimer va mucho más allá. Afecta a todas las capacidades del individuo, y se las va despojando de una en una". (Ventura Anciones).
"En el caso de esta enfermedad, ganar unos años puede suponer una gran mejora en la calidad de vida. Porque, como dijo en 2010 Emilio Marmanéu, expresidente de la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Alzhéimer (Ceafa) en la presentación del Año Internacional del Alzhéimer que se celebra ahora -y cuyos días clave serán los próximos 22 y 23 de septiembre, con la celebración de la Global Alzheimer's Research Summit, en Madrid- al tratarse de una enfermedad asociada a la edad, si se retrasan los peores síntomas 10 años se conseguirá que la muerte llegue por otras causas. Y, lo más importante, antes de que el deterioro neurológico esté en su fase más devastadora."
" El entorno de los enfermos de alzhéimer es uno de los aspectos que más hay que cuidar. El lema es claro: "Hay que cuidar al cuidador". "
"Dentro de las dudas de los cuidadores, uno de los momentos más duros es el de decidir si hay que ingresar al enfermo en un centro. Anciones afirma que, mientras sea posible, el paciente debe estar en su casa e, idealmente, con un cuidador principal. "Los enfermos necesitan referencias. Cualquier cambio les trastoca, les crea ansiedad, agresividad". "El hombre es un animal de costumbres. Para cada uno su televisión, su cuarto, su cuchara es la mejor. Y las personas con alzhéimer, como pierden los resortes para adaptarse, sienten una terrible angustia e irritabilidad ante los cambios", afirma el médico. En cualquier caso, sigue predominado la idea de que cada uno es un mundo."
Por último termino con esta frase:
"Con el alzhéimer uno aprende la diferencia entre ser y estar. El punto está cuando llega el momento en que el individuo deja de vivir para empezar a durar".
En este vínculo podemos encontrar consejos básicos para el cuidado de las personas que tienen esta dura enfermedad.